Lucas 18,9-14 Un día Mafalda recibió de su mamá un plato de sopa, y comenzó a increparla diciendo que era una cosa nefasta, la cosa más inmunda que jamás había probado, y luego de ver con detenimiento su plato, volteó a la cocina y le preguntó a su mamá: "¿o te molesta la crítica constructiva?" Algo así se me figura que nos dice Jesús con esta parábola del publicano y el fariseo, que parece que nos invita a la oración humilde, para más bien es una linda crítica constructiva. Porque aunque la parábola siga a otras dos que hablan sobre la necesidad de la oración, y en esta tercera la situación de los personajes sea precisamente de oración, el narrador nos dice que Jesús contó la parábola por aquellos que se creían más que los demás. Y aquí es donde comienza la parte cruel, porque nosotros solemos sentir cierta antipatía por los fariseos, y mucha empatía con los pecadores perdonados por Jesús en el evangelio. Pero en la época en que se escribieron los evangelios había