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Mostrando entradas de octubre, 2015

Bartimeo y el sínodo de la familia

Marcos  10, 46-52 Es cosa de imaginar el ambiente de enorme y contenida expectación. Después de predicar  por un tiempo la llegada inminente del Reinado de Dios, había llegado por fin el momento anunciado. Después de decidir finalmente viajar de Galilea a Jerusalén, había llegado el momento que habían soñado. Después de mil años de la promesa dada por el Señor a David, su siervo, había llegado la hora en que un descendiente de David volviera a sentarse en el trono de su Padre, el trono afincado por Yahvé para iniciar su reinado no sólo sobre Israel, sino sobre el conjunto de las naciones.  Para eso habían viajado con Jesús desde Galilea. Su ilusión era sentarse a la derecha o a la izquierda de Jesús y compartir con él el poder, el honor y la gloria. No iban a permitir que la hora esperada por siglos, que el ansiado cumplimiento de las promesas mesiánicas se retrasaran por culpa, literalmente, de un mugroso limosnero ciego apostado a la orilla del camino. Bartimeo era una insigni

Voces del Evangelio

Marcos 10,17-31 Svetlana Aliexievich, Suetlana, como lo pronunció en inglés la académica sueca encargada de anunciar al mundo a la ganadora del Premio Nobel de Literatura de este año. No la conocía. Hurgando en internet descubrí que sólo tenía un libro publicado en español: Voces de Chernóbil: crónica del futuro . El libro comienza con una nota histórica sobre la serie de explosiones que destruyeron el reactor y el edificio del cuarto bloque energético de la Central Eléctrica Atómica de Chernóbil, situada en la frontera bielorrusa el 26 de abril de 1986. Se nos entregan datos y estadísticas.  Pero la escritora no es una novelista, mucho menos una historiadora. Es en primer lugar una periodista, y ella misma nos informa después que no hará un recreación novelada ni una crónica de lo que sucedió,  que de eso ya hay mucho. Su libro es una polifonía, y las voces que en ella hablan son las de mujeres y hombres que lo vivieron,  las voces de sus entrevistados. La primera de ellas, Lui

"Lo que Dios ha unido..."

Marcos 10, 1-16 Un día, volviendo de la calle, Raquel preguntó a su hija Mafalda: "¿Y?... ¿Qué tal se ha portado tu hermanito?" "Bien", contestó Mafalda. "Sólo que se me ocurrió sacarle el chupón y hay que ver cómo se puso." "¡Ah, qué bonito!", la reprendió su mamá, "¡debería darte vergüenza! ¡Una grandota haciendo sufrir a un chiquito indefenso! ¿Dónde se ha visto?" Se queda pensando Mafalda, y le responde: "¿En la ONU?" Vale la pena tener en cuenta que en esta escena del Evangelio Jesús no está queriendo dar cátedra sobre el matrimonio y el divorcio, sino en primer lugar está defendiendo a la parte generalmente, pero no siempre, débil de la familia: la mujer y los niños. El asunto de fondo es si puede el varón divorciarse unilateralmente de la mujer, si puede por sí mismo arrojar sin más a su esposa a la calle.   N o estamos ante una inocente discusión de escuela o planteamiento de opiniones, Jesús está jugándose